¿Dónde estamos y hacia donde vamos?

Esta es una de esas preguntas que muchos nos hacemos, en muchos casos, cuando vemos el sin sentido de muchos acontecimientos que nos llegan diariamente a través de las informaciones, noticias, etc.


¿Dónde estamos actualmente?. ¿Somos conscientes de lo que somos y como somos?

La globalidad social, hace inexorablemente que el planeta poco a poco se vaya pareciendo a una pirámide de estatus y niveles socio económicos que hacen cada vez más difícil la convivencia entre unos y otros. Es la lucha por la supervivencia pura y dura, sin escrúpulos.

Cada cual, va a lo suyo, o a lo que buenamente puede, sin pensar en los demás, en su entorno, en que medida afecta a los demás los actos que realiza.

¿Es esta la sociedad que queremos?

Por suerte no todo el mundo es así, pero a veces se hace un poco complicado encontrar “personas” que tengan la conciencia de cómo compartir este mundo y de alguna manera hacerlo mejor, no solo para el mismo, sino para los demás.

Aún nos queda mucho por evolucionar y aprender, no tanto a nivel tecnológico que, evidentemente también lo hace (y de que manera) sino también a nivel espiritual.

La espiritualidad, no tiene nada que ver con la religión, ni historias que se le parezcan. Más bien yo lo defino como una forma de sentir interiormente hacia si mismo y hacia los demás, hacia lo que nos rodea.

Es una forma de vida y de pensamiento. No es de extrañar que en muchas ocasiones haya hablado de tolerancia, respeto, comprensión y repulsa a los fanatismos de todo tipo.

Estamos inmersos en una sociedad egoísta que debe madurar para cambiar y mejorar la convivencia social.

¿Alguien se imagina en Madrid o algún sitio de España, (puede haber excepciones), no se, por ejemplo un kiosco de prensa sin dueño, con la prensa a mano, con una hucha para pagar el importe de lo que se coge? Más de uno, por no decir una gran mayoría tendrá ese misterioso y rara costumbre –quizás mediterránea o latina- no se, de coger la prensa y pasar de largo sin echar las monedas. ¿o no?

Es un ejemplo sencillo y práctico pero que viene a enseñarnos, la poca confianza que hay en una sociedad la cual no es capaz de auto corregirse y ayudarse, salvo eso si, en casos muy extremos. Es la picaresca como dicen algunos.

La picaresca de abrir la ventana del coche y tirar las cenizas y restos a la calle, la picaresca de escupir o tirar los papeles al suelo y no usar las papeleras.... la picaresca de aparcar el doble fina aún sabiendo que no debe hacerse y que vamos a molestar, o de aparcar en un paso cebra, mostrando nuestro desprecio a los peatones y las personas discapacitadas que tengan que pasar por esa zona de acera baja (si la hay).

La picaresca..... esa palabra que parece hasta graciosa pero que no es otra cosa que una metástasis o cáncer social, por la falta de respeto y tolerancia entre unos y otros.






¿Hacia donde vamos?


¿Vamos hacia una sociedad más justa? ¿Un planeta más armónico y espiritual?

Me gustaría decir que si, pero tengo mis dudas.

Dudas ante la pasividad social y de los estados (gobernantes, etc) ante los grandes problemas que ocupan al planeta (los verdaderos), esos de los que casi nadie habla o muy de vez en cuando por algún motivo casi hasta oportuno por algún motivo.


Me gustaría ver más gente movilizada exigiendo a los gobernantes, mayor justicia y respeto de los derechos humanos en aquellos países donde estos, directamente no existen, en vez de buscar armas de destrucción masiva donde no la hay.

Me gustaría que pensaran un poco más el los problemas a largo plazo a nivel global y no a nivel nacional y a corto plazo, solo así se podría trabajar en temas como el efecto invernadero y el calentamiento del planeta, por no hablar del hambre del mundo, y esa gran e impresionantemente abandonada AFRICA, que viene a ser como el gran cementerio global donde mueren miles de niños y personas a diario y casi nadie hace nada. ¿Interesa no hacer nada?

El mundo avanza y evoluciona rápidamente, tecnológicamente, pero mientras hoy, yo mismo escribo estas líneas y las difundo por la red INTERNET en segundos para todo el mundo....otra parte del mundo.....se está muriendo de hambre por falta de alimentos, agua y medicinas.

¿Cómo es posible que a estas alturas ni siquiera sea posible dar medicina básica a todo e mundo?

¿Tan importante y preferente son los miles de millones de coste de las armas, aviones, barcos y todo el material construido para la Guerra?

¿Es ese el mundo de PAZ que queremos? ¿Lleno de armas? Mal comienzo.


Espero y deseo que a pesar del negro panorama, las personas de corazón, bondad y de luz, hagan que todo esto de alguna manera pueda cambiar, y hacer este mundo más espiritual, más abiertos al cosmos, al universo y a nosotros mismos.


Aún nos queda mucho por aprender.